Arrastrar los pies y sentir la tierra, olores a estiércol y hierba mojada, sentir la naturaleza sin verla...Sonidos especiales que no había escuchado jamás...
Así empezó la tarde más bonita de mi vida, una tarde que ¡nunca olvidaré! Porque cuando por mis ojos entró la luz, lo primero que vi fue algo con lo que llevaba soñando desde pequeña, sin duda enamorada de aquellos seres increíbles de la tierra, una mirada limpia y humilde, ese pelo liso y aterciopelado que tienen, esa confianza en los demás a pesar de esa gran firmeza que todos poseen....
Mi animal preferido,no sólo por su belleza, sino por todo lo que transmiten, son especiales sin dudarlo, pues son agradecidos y ayudan mucho al equilibro emocional.
El caballo reacciona frente a nuestras emociones y es así como se convierte en el espejo de nuestra alma. En su naturaleza reconocer las señales es indispensable para su supervivencia, por esto en ellos podemos vernos a nosotros mismos; nos permite tomar conciencia de nuestros estados emocionales, sean de miedo, rabia, tristeza, alegría, amor, sorpresa, vergüenza o aversión.
GRACIAS, un gracias eterno por haberme hecho este regalo cuando más lo necesitaba.
<<Necesitas la posición del silencio. Si tu cuerpo no está en armonía con el caballo, no puedes escuchar lo que él te está diciendo.>>Jane Bartle
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